Empapelar paredes

19062008

Empapelar es una de las cosas más fáciles que hay, y si el papel no tiene dibujos que te obliguen a “casarlo” mucho más. Es, sin duda, la técnica a emplear si las paredes estan en malas condiciones y tenemos dudas sobre nuestra propia habilidad.

Durante mucho tiempo el empapelado de paredes estuvo en desuso, la moda era pintar y los papeles que se encontraban eran bastante feos. Eso generaba un problema económico porque muchas viviendas viejas tenían las paredes en tal mal estado que aun pintadas seguían viéndose deterioradas y porque además coincidió con la época en que la moda era pintar las paredes blancas, haciendo que se vieran más los defectos. empapelar
Afortunadamente, enseguida, salieron al mercado los papeles blancos que imitan el estucado, y que además se pueden pintar encima. Con ellos el resultado es que las grietas que se abren persistentemente ya no se ven, los múltiples arañazos de la pared quedan tapados, etc. y a partir de los años 90 vuelve con fuerza el papel, primero tímidamente y después con fuerza, no como moda excluyente sino sustituyendo, combinando o alternando con la pintura.

Decidido empapelar, lo ideal seria que las paredes estuvieran en buenas condiciones, pero si no es así no te debe preocupar; el papel disimulará muchísimos defectos aunque eso no te exime de preparar las paredes.

En el mercado hay papeles de todos los precios y para todos los gustos. Los puedes encontrar desde muy baratos (incluso alguno de los caros podrás comprarlo de oferta si habitación no es muy grande), hasta con precios escandalosos.

En cualquiera de los puntos de venta de papel decorativo te indicaran el tipo de cola que el papel adquirido precisa, ya que algunos papeles por su grosor o peso necesitan una cola más fuerte.

Si la lógica no te ayuda, instrucciones sobre como empapelar son fáciles de encontrar, así que

¡ANIMO!

Bricolaje Decoración

Ver otras etiquetas